La Voz de los Trabajadores
Dirigentes gremiales, de izquierda, académicos, jóvenes y veteranos de las luchas sociales, así como amigos y familiares de víctimas de la represión, se concentraron frente a la Academia Dominicana de la Historia (ADH) este 16 de febrero en horas de la mañana. Al conmemorar 50 años de la ejecución de Francisco Alberto Caamaño, exigieron a la institución académica revocar la designación de uno de los responsables del crimen, el ex militar Ramiro Matos, admitido como miembro correspondiente nacional de la ADH el año pasado. Matos es señalado por su responsabilidad en crímenes de lesa humanidad como la represión contra los expedicionarios de 1959, el asesinato de Manolo Tavárez Justo en 1963, la ejecución de Francisco Alberto Caamaño en 1973, la represión contra las protestas populares de 1984, entre otros.
Las personas presentes corearon consignas como «Manolo está presente, se siente se siente» y «Caamaño está presente, se siente, se siente». Una comisión en la que participaron Minou Tavarez Mirabal, Fidelio Despradel y Raúl Pérez fue recibida por el presidente de la ADH, Juan Daniel Balcácer, quien aseguró que la solicitud, contenida en una carta, sería discutida en la próxima asamblea de la institución. Entre las organizaciones que participaron y que suscribieron la carta consignada estuvieron la Corriente Magisterial Juan Pablo Duarte, Opción Democrática, el Movimiento Socialista de Trabajadoras y Trabajadores, la Fundación Francisco Alberto Caamaño Deñó, Frente Amplio, Partido Comunista del Trabajo, Juventud Caribe y el Frente Renovador Universitario.
En los últimos meses se han acumulado los repudios públicos y cuestionamientos a la Academia Dominicana de la Historia por el nombramiento de Ramiro Matos. En diciembre de 2022, Minou y Manolo Tavárez Mirabal publicaron una carta abierta cuestionando la designación. El 3 de febrero de este año, el Movimiento Socialista de Trabajadoras y Trabajadores emitió una declaración en solidaridad con dicha carta abierta. El 7 de febrero, el profesor Michiel Baud, miembro correspondiente extranjero de la ADH, dirigió una carta a la institución reclamando que fije posición pública ante los cuestionamientos a la designación de Ramiro Matos. El 13 de febrero, el secretario general del PCT emitió un comunicado a nombre de esa organización rechazando el nombramiento.

A continuación el texto de la carta entregada ante la Academia Dominicana de la Historia por parte de organizaciones sociales y políticas, académicos, intelectuales, artistas, trabajadores y activistas:
16 de febrero de 2023
Santo Domingo, D.N.
Sr. Juan Daniel Balcácer
Presidente
Academia Dominicana de la Historia
Distinguido Sr. Balcácer,
Nos dirigimos en el día de hoy a la Academia Dominicana de la Historia con todo el sentido de gravedad y urgencia con el que corresponde emplazar a esta institución en vista del rumbo que ha venido tomando en el último período y que esperamos sepa rectificar a tiempo. Como varias de las organizaciones y personalidades hoy presentes ya hemos expresado públicamente, rechazamos con indignación la incorporación del general retirado Ramiro Matos González como miembro correspondiente nacional de la Academia Dominicana de la Historia, incorporación hecha efectiva el año pasado. Es público y notorio que entre los crímenes atribuidos a Ramiro Matos están la participación protagónica en la tortura y asesinato de Manuel Aurelio Tavárez Justo, mejor conocido como Manolo, crimen del que se cumplirá este año seis décadas; el asesinato y desaparición forzada de expedicionarios de 1959 en plena dictadura trujillista; la sanguinaria represión como Secretario de las Fuerzas Armadas del gobierno de Jorge Blanco contra las protestas populares de abril de 1984; así como su responsabilidad como jefe operativo en la ejecución de Francisco Alberto Caamaño Deñó, precisamente un día como hoy hace 50 años.
Esta designación, injustificable desde el punto de vista académico y que solo cabe interpretar como un reconocimiento de carácter político a uno de los ejecutores de las políticas represivas y genocidas tanto del período trujillista como del post-trujillista, ubica a la Academia Dominicana de la Historia en una situación de abierta complicidad y apología del crimen que resultaría inaceptable en una sociedad guiada por valores democráticos. Por eso consideramos que es nuestra responsabilidad denunciar permanentemente todas las actuaciones de las instituciones del Estado dominicano que en los sucesivos gobiernos han servido para encubrir a los más atroces represores y los más terribles crímenes contra la humanidad. La impunidad que ha recubierto a los criminales no debe sumar la complicidad de una institución como la Academia Dominicana de la Historia, cuya función debería ser velar por el “conocimiento y estudio del pasado en general, y principalmente el de la nación dominicana”, según se desprende de sus propios estatutos. La complicidad mafiosa, el compadrazgo y el encubrimiento del crimen son incompatibles con la misión de la institución.
No podemos ser ingenuos con respecto a la trayectoria de la propia Academia Dominicana de la Historia, fundada en la época trujillista. Por eso la modesta exigencia de no aceptar como miembros a perpetradores de crímenes contra la humanidad puede parecer una excesiva, especialmente cuando en el último período se han amplificado desde la institución discursos afines al fascismo, atacando corrientes intelectuales críticas y no-racistas, que buscan reconocer la diversidad de nuestro pueblo. Pero tenemos la convicción de que sin ese mínimo gesto de integridad cívica y coraje moral, sin la simple acción de poder decir que NO, que no se aceptan genocidas en la Academia Dominicana de la Historia, simplemente este curso antidemocrático seguirá manteniéndose y su bancarrota política, moral y finalmente académica será irreversible.
Como organizaciones sociales y políticas, familiares de las víctimas, intelectuales, artistas y activistas, exigimos que se revoque la designación de Ramiro Matos González como integrante de esta Academia y que la institución se ponga a la disposición del pueblo dominicano para exigir castigo a todos los asesinos de los períodos de Trujillo y Balaguer que siguen en la impunidad. Así aportará su parte a la tarea pendiente de la definitiva destrujillización de las instituciones dominicanas.
Necesitamos verdad, justicia y reparación. Necesitamos una Comisión de la Verdad que aporte a la justicia, a la reparación y a la memoria de nuestro pueblo. Necesitamos un poder judicial independiente que cumpla sus funciones y realice las investigaciones sobre las querellas que han sido archivadas. Necesitamos poner fin a 60 años de impunidad.
Un comentario en “Organizaciones se manifestaron frente a la Academia Dominicana de la Historia, a 50 años de la ejecución de Caamaño”