Luego de anunciar en un show mediático en septiembre de 2020 que pagaría 1610 nuevas pensiones a trabajadores cañeros, el presidente Luis Abinader «cambió». Redujo las nuevas pensiones a 295, excluyendo de éstas a trabajadores inmigrantes haitianos, una decisión discriminatoria, xenófoba y racista. Más grave aún, en un ataque sin precedentes a los derechos adquiridos de los cañeros, Abinader también dejó de pagar 215 pensiones a cañeros que ya estaban pensionados, en plena pandemia y crisis económica.
Ante estos atropellos antiobreros la Unión de Trabajadores Cañeros ha convocado a una nueva concentración el lunes 9 de agosto a las 10am frente al Palacio Nacional.