La Voz de los Trabajadores

Se produjo un incendio en una de las barcazas termoeléctricas de la empresa turca Karadeniz Powership, estacionadas en la playa de Los Negros de Azua, la mañana del 29 de octubre. Según fuentes de prensa, el incendio generó un nuevo derrame de combustible y aceite, liquidando a innumerables peces. La empresa y el Ministerio de Medio Ambiente, cuya complicidad es abierta, intentaron minimizar el impacto del desastre. En vez de aplicar sanciones o revocar la licencia otorgada a la empresa para su operación en una zona ecológicamente vulnerable, el gobierno se limitó a hacer algunas recomendaciones para la recuperación de los desechos producidos por el incendio.

El 31 de agosto de este año se generó otro derrame ecocida en estas barcazas termoeléctricas, bautizadas popularmente como las barcazas de la muerte.

El Partido de la Democracia Obrera de Turquía se ha solidarizado con las denuncias de las organizaciones sociales, de izquierda, ambientalistas, de campesinos y pescadores de Los Negros de Azua, que ya en el año 2022 habían rechazado públicamente la licencia a este proyecto depredador y contaminante. Lamentablemente, el gobierno de Abinader y el ministro Ceara Hatton decidieron destruir Los Negros de Azua y han hecho caso omiso a las protestas y exigencias populares, optando por sofocarlas mediante la represión policial.

El MST consideró que «el único culpable de este nuevo incidente, precedido por derrames y emisiones de gases tóxicos, es el gobierno ecocida de Luis Abinader y su ministro de Ambiente Ceara Hatton, obsesionados con destruir esa zona frágil ecológicamente de la que dependen pescadores y campesinos para sus medios de vida» y exigió «¡Fuera las barcazas de Los Negros de Azua!».